Ante el panorama que se abre a partir de hoy lunes, con las nuevas restricciones a la actividad aprobadas ayer en Consejo de Ministros, desde la Confederación Regional Empresarial Extremeña (CREEX) se ha afirmado que no se cuestionan “antes bien, se acatan y asumen” las decisiones encaminadas a proteger la salud de las personas.
Sin embargo, sí se han cuestionado las formas. Según ha señalado el secretario general de la CREEX, Javier Peinado, “el escenario va a ser similar, pero con menos actividad, y con más incertidumbre, y esto está generando una ansiedad en empresarios y trabajadores que se podía haber evitado, porque daña aún más a la economía”. Peinado ha añadido que si estas medidas se venían madurando ya “qué trabajo costaba haberlas comunicado el jueves, y aprobado el viernes en Consejo de Ministros, dejando margen a empresas y trabajadores para organizarse, porque hay muchas actividades que necesitan de preparación para un cierre prolongado, y no es lo mismo cerrar un fin de semana que quince días”.
El secretario general de la CREEX ha citado como ejemplo, la construcción, “donde en las obras hay que recoger y proteger maquinarias y enseres, poner cerramientos y seguridad, etcétera” o en empresas que trabajan con productos perecederos “que hay que salvaguardar de algún modo, que necesitan un mantenimiento”. A ello se suma que “por mucho anuncio y aprobación del Consejo de Ministros, no teníamos ayer un texto, algo que dijese a empresas y trabajadores qué hacer hoy lunes, cómo se interpretan las disposiciones, cómo se va a operar, y eso es más incertidumbre, que tensiona y crispa más las relaciones entre empresas y trabajadores, e incrementa los conflictos entre los propios trabajadores, según como entienda cada uno que debe proteger su salud y seguridad. No olvidemos que velar por el acceso al puesto de trabajo es, salvo en actividades cerradas por obligación legal, responsabilidad de la empresa, y hay mucha confusión”.
¿CÓMO SE VA A PAGAR?
Otra cuestión fundamental es el modo en el que se van a considerar estos 15 días de cierre, articulados como ‘permiso retribuido recuperable’. “Si autónomos y microempresas ya estaban al límite por la caída de actividad, ¿cómo se pretende ahora, con la actividad parada, que paguen a los trabajadores estos quince días de abril, sin facturar nada?”, ha comentado Peinado, para añadir: “esto no es solo un problema de tesorería a corto plazo, es un problema de viabilidad de la empresa, porque por mucho que se diga que se van a recuperar las jornadas, a medias horas por día, ni se sabe cuándo ni cómo ni la productividad va a ser la misma”.
Por ello, el dirigente de la organización más representativa del empresariado extremeño ha afirmado que toda esta batería de medidas, este ambiente de confusión y la falta de apoyo a las empresas “no ayuda a la rentabilidad y la competitividad, y no olvidemos que si no se mantiene el tejido productivo, al menos el que había antes de esta crisis sanitaria, es imposible conservar los empleos, y menos aún aumentarlo como precisa una región como Extremadura por sus altas tasas de paro”.